Bonita es limpia, cuidada, sostenible, verde. Bonita es atendida, mimada, innovadora, donde es posible conseguir vivienda, hace sentir orgullo y enamora.
Una ciudad BONITA
- Hace disfrutar a los vecinos. La belleza de nuestra ciudad hace que te sientas bien, que te guste tu calle, tu barrio, tu entorno. Que tu día a día sea placentero.
- Garantiza el acceso a la vivienda. Da oportunidades para quienes quieren vivir aquí y para quienes tienen una necesidad habitacional. Una ciudad en la que los jóvenes no tengan que irse fuera de la ciudad a vivir y facilita un mercado inmobiliario al alcance de la mayoría.
- Atrae a nuevos visitantes y turistas. Una imagen bonita, un entorno cuidado y ordenado, es un reclamo para un turismo de calidad. Donde el que es de fuera se siente como en casa.
- Aborda el gran reto de la Biodiversidad. La renaturalización de la ciudad se hace del todo necesario. Luchar contra la contaminación, el cambio climático, la deforestación o la pérdida de biodiversidad es tarea de todos y, principalmente, de las grandes ciudades, como Las Palmas de Gran Canaria.
- Genera empleo. Si posee un buen aspecto, lo que se conoce como “imagen urbana”, hay mayores probabilidades de atraer inversiones extranjeras e industrias locales interesadas en desarrollarse aquí. Generar entre todos un ecosistema.
- Aumenta la seguridad. La suciedad llama a la suciedad y al contrario, lo bonito, lo cuidado, llama al orden, al civismo. Cuando las personas tienen una sensación positiva sobre su ciudad, la cuidan, la miman, hacen que enamore entre todos.
- Fortalece el orgullo local. Los residentes muestran mayor compromiso con su ciudad cuando ven reflejadas sus opiniones y sentimientos en ella. Les brinda satisfacción verla limpia, hermosa e innovadora; todo esto redunda en el orgullo de sentirse parte de ella.